Domingo solar, infinito
Foto: manemático 2012©
Para Ferrán Valdez
DOMINGO SOLAR, INFINITO
hoy puedo leer las cartas que no me mandas todavía
mosaicos moscovitas muerden mis pies
las cúpulas caen como sombreros sobre mi cabeza
del cielo llueve té
y en tu mano se empuña la melancolía del viaje
haces líneas, qué digo líneas, mares, pequeños mares
mares de olitas negras que quieren ser grafías
y los mezclas con números y signos matemáticos
en un globo terráqueo cuadriculado y plano
como una hoja de cuaderno francés
hay manchas y ribetes y olanes y canciones
domingo solar, infinito
en el que te leo en una tinta de limón secado al sol
que nadie más alcanza a descifrar
está ahí el silencio que va hasta el gordo pecho
de Rebroff y vuelve como un vector descompuesto
a cualquier punto de este día
de los árboles a la hora a las nubes al teorema
y a la inmensa sandía que los rusos comen en el parque
en medio del verano y los panderos
domingo solar, infinito.
Karla Olvera, alba del 20 de junio, 2012.